24.5.13

me vengo en ti

                              me encuentro en mí

                                                                    nos encontramos
                            
                               

Retroducción

Habría que comenzar no por hablar ni por callar, 
sino por hallar, 
habría que quitar el dedo del renglón, y los puntos sobre las íes, 
salir no por la SALIDA, 
ni mucho menos por la ENTRADA, 
sino por la de emergencia.
Habríamos de caminar caminos paralelos, apreciarnos a distancia, 
porque las cercanías empañan. 
Habriamos de tener el amor por oro,
y ese oro como un tesoro, y así no disiparlo,
como bien aconseja el capítulo siete del libro de Mateo.
Habríamos de fomentarnos,
sembrarnos,
pensarnos,
pero no mediando ningún elogio,
has de saber que aquí éstos tienen veneno de lisonja.

Abro de irnos amando en el polo opuesto del Amor.